Hay gente con la que, definitivamente, es muy difícil tratar. Es más, si pudiéramos, los apartaríamos de nuestra vida y seguiríamos adelante con la sensación de haber dejado una pesada carga atrás. Pero no siempre esto es posible, y te tienes que enfrentar al gran problema de lidiar con ellos. Conseguirlo, y sin convertirte en otro tipo de persona intratable, es todo un reto.

¿Quieres saber cómo tratar con gente difícil y salir airoso del acontecimiento? A continuación te lo contamos.

Cómo tratar con gente hostil

Las personas hostiles son agresivas, y tratar con ellos requiere mucho tacto. Estas personas son muy sensibles a las críticas, y reaccionan con violencia cuando se sienten atacados (y saltan a la mínima).

Con las personas hostiles hay que tratar de ser cortés y comprensivo, especialmente cuando se trata de exponerle un error o reclamarle algo.

Para tratar con ellos a diario, evita los temas de contenido emocional, no seas vengativo si reacciona agresiva o violentamente y, sobre todo, pasa de esa persona cuando se ponga violenta. No vas a solucionar nada.

Para tratar con personas hostiles, es fundamental que no grites y que mantengas la calma, que le invites a que te explique las cosas y que no le juzgues mientras está en plan agresivo. Además, es fundamental que pongas límites para que quede claro en qué términos estás dispuesto a dialogar.

Cómo tratar con personas pesimistas

Las personas pesimistas suelen amargarnos el día, echar por tierra todas las ilusiones y criticar cualquier iniciativa, centrándose solo en lo malo.

Para tratar con gente pesimista, es fundamental que te concentres en lo tuyo, que no te dejes arrastrar por ellos y, sobre todo, que no discutas con ellos. No te dejes contagiar. A la mínima, cambia de tema. No intentes convencerlos. Tú no tienes que justificar nada. Y si están comportándose de manera pesimista sobre sus propios problemas, haz lo mismo.

Los pesimistas son masocas: cuanto más intentes ayudarlos, más motivos encontrarán para el pesimismo. En el fondo, les haces un favor, porque no les animas a cavar un hoyo más grande.

Cómo tratar con los quejicas

Las personas quejicas son muy difíciles de tratar. Tanta negatividad termina sacando lo peor de lo que llevamos dentro cuando estamos con este tipo de gente. Nos volvemos insensibles y descorteses.

Esta gente siempre va a encontrar un motivo para quejarse, aunque estén mejor que nadie, porque siempre van a sacar lo peor de cualquier cosa.

Para trata con los quejicas, debes recordar no caer en la trampa de sentirte culpable o responsable, ni te pongas a la defensiva, ni contraataques. Eso les servirá para tener más motivos para quejarse y seguir responsabilizándote de algo, aunque solo sea de que no le escuchas o no le haces caso.

Tratar con este tipo de gente, intentando hacerles ver que se quejan de vicio, suele ser una pérdida de tiempo. Por eso, la mayoría de la gente termina dejándoles de lado, incluso sus más allegados.

Próximamente

En el siguiente artículo te seguiremos contando cómo tratar con gente difícil. En la próxima entrega hablaremos de cómo tratar los típicos sabelotodo pedantes, con los que siempre tienen que buscar la aprobación de los demás en todo lo que hace y con los que no son capaces de hacer nada por sí mismos sin llevarse a todo el mundo por delante.

¡No te lo pierdas!

Imagen – ccalmons (BigStockPhoto)