Resolver el problema del mal aliento puede ser tan fácil como implementar una serie de sencillos hábitos en tu día a día. Si después de incluir este rutina contra el mal aliento no notas mejoría te recomendamos examinar otras causas del mal aliento, las cuales pueden estar interfiriendo en la salud de tu boca.

Desayuna con un cítrico

El ácido cítrico aumenta el flujo de saliva. De esa manera, empezaremos el día activando glándulas salivales. La naranja, el limón, la lima, el pomelo y el kiwi son excelentes opciones. Eso sí, no te olvides cepillarte los dientes inmediatamente después de desayunar, pues el ácido cítrico puede dañar el esmalte de los dientes.

Cepíllate los dientes después de cada comida

Incluye un cepillado después de cada comida. Si es necesario, puede ser una gran idea llevar contigo un pequeño cepillo de viaje en caso de que tengas previsto comer fuera. El cepillado debe incluir tanto los dientes como la lengua, así como el uso de seda dental para retirar los restos que se quedan entre los dientes y que no pueden ser eliminados con el cepillado normal.

Bebe abundante agua durante todo el día

Hidrátate con agua a lo largo de todo el día. No sólo mejorará el funcionamiento de las glándulas salivales sino que, además, evitará que tu boca se reseque, una de las principales causas del mal aliento.

Come de manera adecuada para evitar el mal aliento

Mastica los alimentos varias veces para aumentar el flujo de saliva y evitar la fermentación de los alimentos en el estómago cuando éstos no han sido adecuadamente masticados.

Si comes ajo, cebolla o tienes una comida pesada toma un comprimido de enzimas digestivas que te ayuden a digerir los alimentos de forma óptima y eviten así reflujos o la fermentación de la comida.

Enjuague bucal nocturno antiséptico

Termina tu cepillado nocturno con un enjuague y gárgaras utilizando un colutorio antiséptico sin alcohol. De esa manera garantizarás irte a la cama con la boca libre de gérmenes y bacterias.

Asegúrate de tener la nariz despejada antes de irte a dormir y evita dormir en posición horizontal

Dormir con la boca abierta por la noche puede llevar a la sequedad de la misma y con ello el mal aliento. Asegúrate de tener la nariz totalmente despejada con los consejos que damos en este otro artículo. Además debes tener en cuenta que dormir en posición horizontal puede propiciar que abras la boca, de forma que te recomendamos dormir en una posición ladeada.

Estos sencillos consejos pueden ser implementados en tu rutina diaria con enorme facilidad y te garantizamos que tu aliento será fresco y agradable durante todo el día. ¿Qué te ha parecido? ¿Te parece sencillo? Cuéntanos tu experiencia con el mal aliento y cómo lo resolviste.

Imagen: MaryScheirer