Mantener una relación de pareja sólida siempre implica una vinculación afectiva que, a medida que avanza en el tiempo y adquiere nuevas implicaciones, se estrecha todavía más. Sin embargo, cuando sospechamos que el grado de dependencia es excesivo e incluso disfuncional, debemos detectar el problema y buscar una solución profesional, como la que ofrece el Gabinete psicológico El Prado, del que puedes aprender más en el siguiente enlace: https://www.elpradopsicologos.es/pareja/dependencia-emocional/.

La dependencia emocional es especialmente común en aquellas personas que durante su infancia o adolescencia han experimentado relaciones inseguras (ya sea con padres, hermanos o amigos) y que hayan desestabilizado su capacidad de confianza. En Salud y Amistad queremos recalcar la importancia de esta problemática, ya que además de afectar a los miembros de la relación imposibilita el correcto desarrollo de sus vidas cotidianas. Es por ello que hoy queremos aportar nuestro granito de arena para que puedas superar la dependencia emocional en caso de que la padezcas. No es un proceso fácil, pero quizás el primer paso sea echar un vistazo a los 5 consejos para dejar de depender de tu pareja y ser más independiente.

Consejos para dejar de depender de tu pareja y ser más independiente

1. Reconocer y reflexionar sobre el problema

El primer paso es reconocer que padecemos dependencia emocional, dejando de lado la tendencia de culpabilizar a los demás, haciéndoles responsables de nuestro estado. Te recomendamos que dediques un tiempo a realizar una profunda reflexión acerca de tu padecimiento, fomentando el auto-conocimiento y averiguando cuáles son nuestras causas particulares. Algo que puede resultarte útil es hacer un listado de todas aquellas actitudes que te perjudiquen.

2. Aprender a disfrutar del tiempo en soledad

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Seguro que lo has escuchado alguna vez: sólo podemos estar completamente a gusto con una relación si previamente nos sentimos completos individualmente. Y es completamente cierto. Es por ello que para conseguir eliminar la dependencia emocional, deberás aprender a disfrutar de tu propia soledad, gozar del tiempo por ti mismo. Esto, además de permitirte descubrir nuevas habilidad e intereses, marcará la dependencia entre el deseo de tu pareja y la necesidad de la misma.

3. Trabajar en reforzar tu autoestima

El denominador de toda dependencia emocional es una baja autoestima, es por ello esencial trabajar en mejorarla. Las opciones son numerosas: puedes comenzar a tomar medidas como evitar las comparaciones y las aprobaciones ajenas constantemente, tomar decisiones por ti mismo en las que nadie más pueda influenciar o lanzarte a iniciar nuevas aventuras y proyectos profesionales o emocionales. ¡Ah! Y recuerda que la verdadera autoestima no es meramente una pose de seguridad, sino que consiste en la sincera aceptación de todo lo que somos.

4. Establecer tus propias metas emocionales y profesionales

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El objetivo a la hora de trabajar tu independencia emocional es logarla tanto emocional como profesionalmente, de forma que tu vida tiene que cobrar un sentido completo con independencia de la presencia o la ausencia de tu pareja. Es por ello que no debes postergar nada de lo que te llene individualmente y construirte continuamente una vida que nadie pueda arrebatarte. Reúnete con tus amistades, persigue tus sueños y dedícate todo el tiempo que puedas a mimarte.

5. Aprender a vivir con la incertidumbre

Por último, es importante destacar que el miedo es nuestro peor enemigo. En la mayoría de los casos, es el temor a afrontar los posibles cambios en soledad lo que nos frena a la hora de avanzar y cambiar. Por este motivo, es indispensable que salgas de tu zona de confort y que adoptes una actitud positiva. Recuerda que además siempre habrá una parte de tu vida que estará sujeta al azar y que no podrás controlar, por lo que deberás aprender a vivir con la incertidumbre y sentirte tranquilo.

Terminamos nuestra serie de consejos aquí, recordándote que para comenzar una relación sana debemos dejar atrás todas nuestras carencias que nos impiden disfrutar de nuestras relaciones en plenitud. ¡Anímate a pasar de la dependencia emocional a la autonomía afectiva! Como siempre, te animamos a que nos cuentes todas tus impresiones en nuestra sección de comentarios. ¿Sospechas padecer dependencia emocional? ¿En que situaciones de la pareja sueles sentirte más vulnerable? ¡Te leeremos con atención e interés! 🙂