Internet ha supuesto un gran cambio para la vida de quienes habitamos las urbes occidentales. Nuestros abuelos, padres, e incluso nosotros mismos hace unos años, nos levantábamos en la mañana a leer el periódico con las noticias del día. En nuestras manos y entre nuestros dedos se plegaban esas delgadas y toscas páginas. Además, accedíamos a una o quizá dos fuentes para actualizar nuestra opinión. Los cambios son más que evidentes, y en ellos queremos profundizar en esta ocasión. ¿Nos acompañas?

Cambios en nuestros hábitos fomentados por Internet. ¡Descúbrelos!

Hábitos de Internet 2

1. Las noticias al alcance de nuestra mano sin malgastar papel

Hoy leemos (vemos u oímos) las noticias desde los portales web de noticias -ya sean los más tradicionales o aquellos que han aparecido para innovar-. Tomamos nuestro móvil, deslizamos la pantalla de las redes sociales, o las aplicaciones de informativos, ya sin sentir esas toscas hojas y su casi olor a tinta fresca. ¿Pero qué melancólico dijo que esto es por completo negativo? En primer lugar, utilizamos menos papel, que por estos tiempos no está para ser gastado sin límite alguno; y, en segundo, podemos leer todas las fuentes que queramos, con la posición, opinión, color e incluso lengua que sea de nuestro gusto. ¿Qué más podemos pedir?

2. Ocio sin necesidad de desplazarnos

Tomar el coche, aunque no quieras salir casa, para pasar un rato entretenido ya no es necesario. Si antes de Internet querías tener un rato agradable de ocio, necesariamente tenías que salir de casa, buscar un lugar de juegos o un Casino, no importa qué tan lejos estuviera, para entrar y relajarte un rato; ahora eso no es necesario. Internet a puesto en nuestras manos, y a un par de teclas de distancia, la posibilidad de apostar y divertirnos por montones desde la comodidad de nuestro hogar, en nuestra ropa más holgada. ¿Acaso ha existido algo más cómodo que Internet?

Probar suerte es de los juegos más tradicionales en la historia de la civilización, pues Internet no se puede quedar atrás; este ya nos ofrece buscar fácilmente las mejores ofertas de casino sin necesidad de movernos de casa. En la antigüedad, cuando las apuestas comenzaron, se creía que los resultados eran ya capricho o ya favoritismo de los dioses hacia quienes jugaban, ¿hoy serán capricho de la Web los resultados del juego? ¿Acaso los dioses cibernautas estarán de tu lado? Por si acaso, no renuncies a vivir tus propias aventuras en casinos por internet.

3. Gestiones sin presentarnos de forma presencial

¿Recuerdas esos largos y desgastantes trámites en el banco? ¡Cómo olvidar las largas filas para pagar cualquier factura! Las aplicaciones de muchos bancos ahora permiten hacer transferencias, pagos, consignaciones y muchas otras diligencias desde la comodidad de nuestro móvil u ordenador. Definitivamente, Internet parece la panacea del confort.

4. Pedir una gran variedad de comida según se nos antoje

Nos reuníamos con amigos en el piso, de repente a unos se les antojaba pizza de este lugar, a otros unas hamburguesas de este otro, y entonces ocurría una larga deliberación sobre qué ordenar, seguida de una larga espera. Hoy muchas aplicaciones nos permiten pedir, en una sola orden, productos de varios lugares, sin tener que llamar a varias líneas telefónicas -que parecen cosa del pasado- y desde la comodidad de nuestro móvil. ¡Que vivan las reuniones de amigos, ahora con un problema menos!

5. ¿Dónde han quedado los Blockbuster?

¡Pero qué lío era encontrar una película, un álbum o un buen libro, antes de existir Internet! Si no estaban en el Blockbuster, las grandes tiendas de discos o las librerías más conocidas, había que rodar y rebuscar entre las tiendas más underground de la ciudad. Y si bien esos lugares pueden traer sentimientos de melancolía y de bohemia, no era tan satisfactorio recorrer la ciudad durante varias semanas sin encontrar lo que se andaba buscando, o encontrando malas versiones, traducciones o copias. Hoy con Internet existen varias plataformas donde fácilmente entrar y encontrar el material que se buscaba, no importa su género, país, idioma o productora.

6. Estar en contacto con nuestras amistades lejanas

Para estar en contacto con nuestra amistades debíamos tener, antes de Internet, unas grandes y molestas agendas donde anotábamos números telefónicos y fechas de cumpleaños. Con las ocupaciones diarias, el tiempo no da para revisar estos calendarios. Ahora, con varias redes sociales, solo nos queda esperar la notificación que nos recuerda las fecha de cumpleaños, ya no pasaremos por la vergüenza de olvidar el cumpleaños de nuestra tía o amigo de la universidad. También las redes sociales nos ponen solo a un clic de distancia, la posibilidad de llamar, video-llamar, enviar mensajes o fotos a nuestros amigos más queridos; e incluso, de jugar con ellos online.

Dicen que el dinero mueve el mundo, y esta afirmación de falsa no tiene nada. El dinero mueve también los hábitos que conforman nuestra vida, por eso muchas de las primeras costumbres que cambió Internet tienen que ver con lo que más dinero pone en movimiento: la comida, los bancos, la comunicación y los juegos de ocio. ¡Déjanos tus impresiones y opiniones en la sección de comentarios!