En verano, el ejercicio físico resulta especialmente agotador. Las altas temperaturas, junto con el exceso de sudoración, hacen que la experiencia del deporte deje de ser gratificante y adquiera un componente de sacrificio extra. La opción es decantarse por disciplinas más suaves, que permitan mantenerse en forma sin necesidad de exponerse al calor. Una de ellas es el joga, una práctica milenaria que gana adeptos año tras año.
Iniciarse en el mundo del yoga requiere la intervención de un profesor. El dominio de las asanas (posturas) y las técnicas de respiración no llegan de la noche a la mañana; es preciso un aprendizaje dirigido por un experto. Pero ahora no es necesario acudir a un centro para iniciarse en la práctica. Con la ayuda de internet podemos aprender a practicar yoga en casa o en cualquier otro lugar.
Una clase particular sin salir de casa
Uno de los gimnasios virtuales que trabaja con mayor rigor la enseñanza del yoga es Ictiva.com. La web dispone de un apartado especializado con videos de diferente duración, lo que permite adaptar la práctica a las circunstancias particulares de cada alumno. Las sesiones están dirigidas por una profesora con larga experiencia; es como tener clases particulares en casa, con la comodidad de poder acoplarlas a los horarios de cada uno.
La metodología es muy sencilla. Con Ictivia el alumno solo ha de seleccionar el nivel del que quiere partir e iniciar las sesiones de trabajo. Los principiantes podrán aprender yoga desde cero, con videos donde se explican detalladamente las posturas y las técnicas de respiración. El gym virtual dispone además de una app de fitness con infinidad de propuestas para estar en forma.
Las clases de yoga se estructuran en cuatro partes: calentamiento, tonificación, estiramientos y relajación. Se imparten dos disciplinas distintas: el yoga postural, denominado también Hatha Yoga, y el Kundalini, que combina las asanas con meditación, pranayamas (ejercicios respiratorios) y el canto de mantras. Los estudiantes noveles pueden disfrutar de dos sesiones gratis para empezar a tomar contacto con la práctica.
Habilitar nuestro propio espacio
Para practicar yoga no se precisan grandes espacios ni una parafernalia complicada. Tan solo es necesaria una esterilla o futón y ropa cómoda. De todas maneras, si queremos disfrutar de la experiencia de una manera más plena, podemos preparar el espacio con algunos detalles añadidos. Esta pequeña preparación, realizada de forma consciente, será en sí una introducción a la sesión de trabajo y proporcionará un clima especial a toda la práctica.
Podemos empezar buscando un rincón de la casa acogedor y tranquilo, a ser posible poco recargado de muebles y con escasa decoración. Bajaremos la intensidad de la luz y colocaremos nuestra esterilla o futón de forma paralela a la pantalla del dispositivo electrónico elegido (smart TV, ordenador portátil, tablet, teléfono móvil, etc.) Es recomendable encender alguna vela y quemar incienso; de esta manera, estaremos creando un ambiente propicio para la práctica.
Ahora solo quedará entrar en Ictivia e iniciar las sesiones de trabajo. Lo importante es no tener prisa y tomarse el tiempo necesario. Completar las asanas de forma correcta lleva su tiempo, pero el cuerpo y la mente lo agradecerán.