Las grandes amistades no tienen precio, pero escasean, por lo general. Tener muchos amigos no significa tener buenos amigos. Y pasárselo bien con otros tampoco implica que la relación sea en realidad una verdadera amistad. Tampoco podemos olvidarnos de esas relaciones en las que uno da mucho para portarse como un buen amigo, pero a la hora de la verdad recibe poco del otro. Entonces, ¿cómo saber quiénes son realmente nuestros amigos? ¿Cómo podemos diferenciar una amistad saludable de una relación   abusiva o de una relación superficial? Estos son los interrogantes a los que intentaremos dar respuesta en este artículo de Salud y Amistad a través de las señales de una buena amistad.

¿Cuántos amigos de verdad tienen? Descúbrelo con las señales de una buena amistad

7 señales de una buena amistad

Muchas veces cometemos el error de pensar que toda persona conocida es, en verdad, nuestro amigo/a. Sin embargo, y aunque somos seres de sociedad, la realidad es que una amistad verdadera es supremamente difícil de conseguir; aquellas personas que se quedan para toda la vida son poco comunes y muy difíciles de mantener en nuestra vida. Por eso, es imprescindible aprender a reconocerlas, así que ten presente las señales de una buena amistad que presentaremos a continuación.

1. La verdadera amistad es honesta y nos permite ser lo que somos

Con los amigos no necesitamos ser lo que no somos ni mostrarnos de una manera artificial para sentirnos bien y hacer sentir bien a los otros. Es más, cuando estamos con nuestros amigos, damos la mejor versión de nosotros mismos.

En este contexto, la honestidad es algo que brilla por si misma. Un verdadero amigo no miente y nos ofrece con sinceridad las opiniones e, incluso, ofrece comentarios que, lejos de estar teñidos de malicia, están enfocados a que seamos mejores o más felices.

2. Los buenos amigos saben cómo discutir sin estropear la amistad

Otra de las señales de una buena amistad tiene que ver con las discusiones; estas son algo normal en las relaciones personales, al igual que los conflictos. Pero una discusión no es sinónimo de conflicto irremediable. Los verdaderos amigos saben solucionar sus diferencias y no son rencorosos, entienden al otro y se esfuerzan por solucionar cualquier conflicto que surja.

3. Los buenos amigos respetan a otras amistades

Tener una relación de amistad con alguien no significa que no puedas tener más amigos, y los amigos de verdad respetan eso; es más, se animan unos a los otros para ampliar el círculo de relaciones. De hecho, una amistad sana significa que a veces los dos pasan tiempo separados, y eso está bien. Debido a que un amigo ayuda a ser mejores cada día, debe apoyar la libertad de establecer la identidad individual.

4. En la amistad verdadera hay confianza mutua, una de las señales de una buena amistad más importantes

Otra de las señales de una buena amistad es la confianza mutua. Una amistad sana implica un alto grado de confianza. Confianza significa sentirse cómodo compartiendo sentimientos o  detalles de la vida propia con el otro sabiendo que no le va traicionar contando sus problemas, tomando acciones en contra o aprovechándose de la situación para sacar partido.

5. En las amistades sanas existen límites

Cualquier relación personal saludable tiene sus límites, y la amistad no es la excepción. Estos límites implican dejar en libertad al otro, no actuar de manera abusiva o acaparadora, y no dar por sentado ciertas cosas, ignorando al otro o no contando con sus propias necesidades o intereses. Encontrar el equilibrio es lo que va conformando una amistad sana y duradera.

6. Las buenas amistades conocen la mejor manera para animarte

Un buen amigo es aquel que, con el tiempo, ha aprendido a identificar tus puntos débiles y fuertes. Esto no solo hace que puedan reconocer perfectamente cuando estas tomando decisiones equivocadas o emprendiendo un camino poco conveniente, sino que identifican adecuadamente qué necesitas en el momento y cómo lo necesitas. Por eso es que son ideales en los momentos de ánimo y necesidad.

7. Aprende a perdonar y a ser perdonado

Como última de las señales de una buena amistad vale decir que los amigos verdaderos son aquellos que entienden cuando te equivocas y, aunque exijan arrepentimiento y esfuerzo, saben que no quieres hacerles daño y, por tanto, descubren el mejor camino para perdonarte. También son aquellos que reconocen cuando se equivocan y lucha por ti, cueste lo que cueste.

A modo de conclusión vale decir que cualquier relación de amistad que valga la pena requiere trabajo, pero eso no significa que tenga que ser difícil. Dedicarle tiempo a tus amigos es necesario para mantener una relación sana. Pero mientras que los buenos amigos no necesitan pasar tiempo juntos constantemente, sí piensan el uno en el otro con regularidad y dedican tiempo para cultivar su relación, buscando siempre lo mejor para el otro y enriqueciéndose mutuamente.

Y tú, ¿Cuáles otras señales de una buena amistad conoces? ¡Cuéntanoslo todo!